Frecuentemente llegan a nuestro taller boquillas con golpes en el extremo del tallo. En la mayoría de los casos se debe a caídas. Esta boquilla de trombón es un ejemplo. Hemos rectificado la salida de la caña para devolverle su genuina forma circular.
Es importante no cortar el tallo de la boquilla ya que la eliminación de material siempre influirá en el sonido (en distintos grados). En este caso la deformación no era tan exagerada como en otros casos.